Los drones en la guerra de Ucrania y la revolución en el campo de batalla

Esta guerra en Ucrania ha marcado un hito en el uso de los drones en el campo de batalla, lo que ha llevado a una revolución militar y tecnológica impulsada por su mayor accesibilidad. Los drones han demostrado ser un arma geopolítica, permitiendo a otros países participar indirectamente en el conflicto.

La variedad de drones utilizados es extensa. Aunque muchos están familiarizados con los drones de uso cotidiano y civil, los avances en este área han dado lugar a dispositivos capaces de recorrer cientos de kilómetros, volar durante días enteros e incluso alcanzar altitudes de hasta 5 kilómetros.

Misiones

En el campo de batalla, los drones tienen diversas misiones que incluyen identificar posiciones enemigas, marcar objetivos para bombardeos, realizar ataques y corregir la posición en caso de fallos en los bombardeos.

Su presencia se limita a áreas específicas, y suelen operar a distancias de uno o varios cientos de metros. Los drones están transformando la forma de hacer la guerra y entendiéndola.

La evolución de los drones se ha enfocado en su abaratamiento y en el aumento de su eficiencia. Los avances en sistemas de óptica estabilizada con visión nocturna y otras tecnologías han permitido que drones que antes solo estaban al alcance de ciertos ejércitos sean accesibles incluso para particulares.

Adquisición de drones para la guerra de Ucrania

Tanto Ucrania como Rusia se encontraban poco preparados en términos de drones para esta guerra. Rusia incorporó a su ejército drones israelíes, como el Fort Post, pero debido a sanciones y bloqueos tecnológicos, ha estado adquiriendo drones iraníes como el Shahed 136.

Por otro lado, Ucrania, con una situación inicial de inferioridad, ha desarrollado drones propios como el RAM, el PD-1 y otros más antiguos como el UJ-22 o el Viber. Además, ha recibido drones donados por Estados Unidos, como los Switchblade 300 y 600, y ha adquirido el Bayraktar TB2.

La guerra de Ucrania ha sido testigo de un aumento significativo en el uso de drones, aunque las cifras reales difieren según los informes. Las pérdidas de vehículos no tripulados ucranianos se estiman en unas 10.000 unidades al mes según una investigación británica, aunque se considera que esta cifra es exagerada y que el número real en uso podría ser de solo varias docenas al día.

El suministro de drones en esta guerra proviene de varios países. Israel e Irán han sido proveedores de drones para Rusia, especialmente del tipo llamado erróneamente “kamikaze” como el Shahed 136.

Por otro lado, Turquía e Irán también están involucrados indirectamente en el conflicto, utilizando drones turcos que han realizado ataques mortales en Ucrania.

Drones con Inteligencia Artificial

El desarrollo de drones con Inteligencia Artificial (IA) es una tendencia emergente. Los drones se están moviendo hacia un control menos humano y más autónomo, y países como China están liderando los avances en este campo.

Turquía ha propuesto la creación de “portaaviones de drones” que llevan aviones no tripulados a diferentes partes del mundo, lo que requeriría un alto nivel de control de IA en segundo plano.

Empresas de drones y tecnológicas, como SpaceX, también han ganado protagonismo en la geopolítica de esta guerra. Esta fusión de empresas tecnológicas en el escenario geopolítico representa una nueva dimensión en el desarrollo de los drones y en la evolución del conflicto.

Los drones han transformado la forma de hacer la guerra en Ucrania, abriendo paso a una nueva era militar y tecnológica. Su uso se ha vuelto más accesible, y su potencial y capacidad de destrucción continúan evolucionando, lo que podría marcar el inicio de una era dominada por los drones en los campos de batalla de todo el mundo.

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